Ingredientes Poderosos
Echa un vistazo al gabinete del baño de cualquier chica francesa y muy probablemente encontrarás un agua micelar limpiadora. Se volvieron muy populares en Paris, como un antídoto contra los componentes del agua de la llave en la ciudad, que pueden llegar a irritar la piel. Ahora, los limpiadores micelares, como el 2-in-1 Cleansing Micellar Gel + Light Makeup Remover y el Take the Day Off Micellar Cleansing Towelettes for Face & Eyes, han pasado de ser un producto nicho de anaquel en farmacia a un esencial indispensable para las ocupadas mujeres de hoy día, sin importar en qué tipo de ciudad vivas. Aquí el por qué.
¿De qué se trata todo este ruido?
El limpiador micelar es una fórmula extremadamente delicada que remueve maquillaje ligero (excepto maquillaje de larga duración o fórmulas contra agua), así como suciedad, polvo, grasa y contaminación que se acumula a lo largo del día. Otro de sus beneficios es que no se necesita enjuagar. Tan solo humedece un algodoncillo y deslízalo alrededor de tu rostro, verás que tu piel se siente fresca y limpia. Piensa en ella como si fuera una rápida y fácil doble limpieza al instante. Además, este producto te refresca sin deshidratar.
¿Qué lo diferencia de los otros limpiadores?
Mientras que los otros limpiadores rompen en partes las impurezas por medio de tensoactivos, los limpiadores micelares contienen las llamadas micelas que trabajan como unos pequeños PAC MANS (sí, estamos hablando del videojuego) que van encapsulando (por no decir tragando) todas las cosas malas. Cuando se aplica en la piel, las micelas rompen, abren y toman todo aquello que no sea agua o epidermis; como el maquillaje, la contaminación, la grasas, etcétera; después se vuelven a cerrar, dejando atrapada la suciedad y haciéndolo muy sencillo para poder retirar con cualquier tipo de tejido (algodón, toalla, papel facial). Como las micelas solo atrapan las cosas malas, dejan el resto de la superficie de tu piel intacta, en consecuencia no se sentirá acartonada o seca. Asimismo, evitas el riesgo de dejar la piel grasosa debido a ciertos aceites contenidos en la formulación de algunos desmaquillantes.
El factor secreto de la luminosidad
Ya que los limpiadores de micelas son tan suaves, éstas pueden realmente impulsar la luminosidad diaria de tu piel. Con frecuencia, un tipo de piel apagada presenta irritaciones y diversos problemas en la dermis. Por lo que entre más gentil sea tu rutina de limpieza, menos serán los desperfectos que experimentarás y tu piel se verá más radiante.
¿Quién necesita un limpiador micelar?
Todo aquel que se siente demasiado ocupado como para llevar una rutina diaria del cuidado de la piel, o quisiera disminuir la cantidad de productos que tiene alineados en el gabinete de su baño. También es ideal para el viajero frecuente o el amante del ejercicio ya que ésta es una forma de limpieza muy práctica porque no se necesita enjuagar. Take the Day Off Micellar Cleansing Towelettes for Face & Eyes son buenísimas para todo esto. Debido a que la tecnología de las micelas es tan suave, es ideal para todo tipo de piel, especialmente para las secas y las sensibles. ¿No utilizas mucho maquillaje? Los limpiadores micelares son perfectos para remover fácilmente el maquillaje diario como son los hidratantes con tinte, el blush, y las sombras de ojos. (Nota: si estás utilizando maquillaje de larga duración o a prueba de agua, tu mejor apuesta seguiría siendo la rutina de limpieza doble, con un producto como el Take the Day Off Cleansing Balm seguido por el Liquid Facial Soap.)
¿Cómo se utiliza?
Presiona y aplica en un algodoncillo la cantidad de una moneda grande del 2-in-1 Cleansing Micellar Gel + Light Makeup Remover, frótalo ligeramente de adentro hacia fuera sobre tus ojos para remover el ligero maquillaje de las sombras. Debido a que la fórmula no contiene alcohol o jabones, es completamente seguro para los que utilizan lentes de contacto o tienen algún tipo de sensibilidad en la piel. Después, remueve el resto del maquillaje utilizando las yemas de los dedos dando un ligero masaje alrededor del rostro, al final pasa una toalla facial desechable y ahora sí, prepárate para radiar.
Fotografía: Alpha Smoot | Texto: Hilary Presley